lunes, 17 de noviembre de 2014

Profeta en su tierra

Dicen que nadie es "profeta en su tierra" y eso me ha sucedido a mí en el Concurso de Sanlúcar de Barrameda. He sido premiado en todos los tres concursos en los que he participado hasta ahora y el de mi tierra es el único en el que me ha quedado sin premio.

Los individuales han estado todos entre 88 y 89 puntos. Estas puntuaciones son parecidas a las que han obtenido en otros concursos, ya que estos pájaros han concursado con anterioridad en Chiclana o Chipiona. En Chiclana obtuvieron premio porque las gamas estaban más abiertas. En Sanlúcar han participado pasteles y opales de fondo amarillo todos juntos, sin diferenciar por la clase de melanina (negro, ágata, bruno e isabela) ni por la categoría (intenso, nevado, mosaico). ¡Así es muy difícil conseguir premio!

Pero lo del equipo de lipocromos amarillos nevados no tiene nombre. Los dos pájaros (el A y el B del equipo) que consiguieron la mejor puntuación en Chipiona (90 puntos ambos) han sido desclasificados, repito "desclasificados". Según el juez son ¡intensos! Esto suena a broma, a pitorreo, a ineptitud...
¿Cómo puede ser que un equipo que gana en Chipiona con 360 puntos sea desclasificado en Sanlúcar?
¡Si no he cambiado ni tan siquiera el orden de los ejemplares!
A partir del jueves, cuando recoja las planillas pondré imágenes de las mismas.

Imagen de las puntuaciones de los dos ejemplares puntuados del equipo y de los dos desclasificados.


Y estas son las puntuaciones del mismo equipo en Chipiona:


¿Qué os parece?
Se agradecen los comentarios.

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